Lisa Gerrard y Brendan Perry son dos artistas australianos que han recuperado una enorme cantidad de canciones, poesías, cuentos y ritmos de todo el planeta. Muchos de ellos casi desaparecidos de nuestra cultura. Juntos formaron parte de los ya disueltos Dead Can Dance, banda que en sus inicios se inclinó por el oscurantismo gótico, para luego entregarse a las raíces del folklore de los cinco continentes. Su trabajo es digno de reconocimiento y es por esos que subimos su última producción a la fecha. "Spiritchaser" fue lanzado en 1996 y significó el fin de 17 años de carrera para DCD, dejando a sus oyentes 8 gigantescos álbumes. Al igual que "Into the Labyrinth", de 1993 , fue grabado en Quivvy Church, una antigua iglesia irlandesa del siglo XIX, la que fue adaptada como estudio por Perry. En el disco en cuestión encontramos pasajes mágicos y reflexivos, que invitan a viajar por países lejanos. Principalmente rescato el trabajo de percusión, el que alude a un trance tribal ; y por otro lado , la delicadeza de la guitarra eléctrica, la que se funde a la perfección con instrumentos no tradicionales. El lenguaje multirracial es otro punto alto, el cual genera una “audio-transportación” hacia lugares desconocidos. Muy lejos del esnobismo y lo exótico, "Spiritchaser" es toda una experiencia para quien lo escucha con detalle. Compartan su música y no pirateen.
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